Hola ^^
No se si alguien aun pase por aqui :$ y lo entiendo totalmente debido a que hace años que no ingreso mi vida laboral no me permitio seguir con el blog :/
Esta entrada fue motivada por una chica que me mando un inbox a mi facebook personal. Te pido una enorme disculpa
Karla Chasing Luzon hasta hace un par de semanas vi tu msj nena 😢 y me lo envio en el año 2014!!!!! Cristo me siento tan culpable que no respondi por verguenza estamos en el 2018!!!! No Karla no segui las historias en otro blog tu msj me hizo releerlas y oh dios que faltas tenia/tengo 😂😂 Pero bueno solo puedo decirte que tenia en mente unas ideas que aun no pude aterrizar como:
*No es que todos quisieran con Valeria ella tenia el don de ser como un iman, la gente se sentia atraida por ella despues de darse cuenta no sabe que es lo que sienten por ella realmente
*Anae como sabran es una traidora y muere salvando a un hombre de los protagonistas
*Por un tiempo Vanne regresa a Mexico
Eso es lo mas relevante de esa historia.
Y de Rounds:
*Mar tiene un amor que jamas creyo encontrar en Max pero el pasado de el regresa rompiendo todo lazo con Mar quien huye de todos (se enrolla con boxeadores enemigos de los chicos) descrube otra clase de amor, Max no se da por vencido y al final ella decidira entre un amor que le proporciona emociones intensas o un amor que solo le produce tranquilidad.
No se si las concluire porque no creo q nadie mas siga por estos rumbos pero en verdad me gustaria darles un final espero lograrlo si no aqui al menos en mi lap ;)
Bueno eso era todo lo que tenia que decir por el momento espero que cualquiera que lea esto sea muy feliz 😘
]*MoshaLutz*[
lunes, 12 de febrero de 2018
domingo, 31 de mayo de 2015
ROUND 4
ROUND 4.
--Max…
--¿Me oíste
Mar? ¡No vuelvas a dormir en la cama de un hombre que no sea la mía! –medio grito
y eso fue toda para sacarme de mi ensoñación ¿Quién se creía que era? ¿Con que
derecho me pedía una cosa así?
--Que te den
–dije e inmediatamente luche por zafarme
de su agarre, pero no me lo permitió solo me abrazo más duro atrayéndome a su
pecho.
--Para Mar,
no vas a ir a ningún lado
--¡Suéltame!
–deje de luchar y el relajo su agarre, espere a que creyera que no haría nada
incluso suspire audiblemente, pasados 5 minutos y en movimiento veloz eleve mi
rodilla lo más rápido posible y le solté un golpe en… el abdomen… quería darle
en las pelotas pero bueno… funciono me libere y rode sobre la cama hasta lograr
ponerme de pie, corrí a la puerta pero se encontraba cerrada, gire y lo
encontré sonriéndome divertido por mi intento de huida, supongo que mi golpe
fue menos efectivo de lo que pensé.
--¡Ábreme la
puerta Max!
--No,
primero debemos hablar y en segundo lugar no volverás a la cama con Oscar
--Pero
¿Quién te crees que eres?
--Ven Mar
–palmeo el lado derecho de la cama
--No Max,
ahora la que no quiere saber nada de ti soy yo
--¿Vienes o
voy por ti? Elige
--¿De que
quieres hablar? –Lo conocía y sabía que no hablaba en broma con eso de venir a
por mí
--¿Por qué
te quedaste a dormir con Oscar?
--¿Es en
serio Max? –rodee los ojos y él me veía cada vez mas cabreado --¿Por qué no
quisiste hablar conmigo? –contraataque
--¿De que
hablas?
--De todas
las veces que quise hablar contigo y que no fuiste siquiera capaz de
enfrentarme y en cambio enviaste a tu amigo hacer el trabajo
--Yo no…
--¿Sabes que
Max? Ya no importa
--Pero yo
nunca supe que tú me buscaste
--¡Olvídalo
Max!
--No –dijo
levantándose de la cama y yendo a mi encuentro, retrocedí todo lo que la
habitación me lo permitió ya que detrás de mí se encontraba la puerta, paso un
mano por mi mejilla viéndome intensamente a los ojos, bajo su cabeza e inhalo
mi aroma, su nariz siguió el contorno de mi mandíbula, mi pulso iba a 1000 por
hora cuando hablo finalmente fue un susurro en mi oído –Nena en lo que a mí
respecta voy a patearle el trasero Adrián, yo te veía tan contenta con Gio y
Oscar y nunca vi ningún interés de tu parte en venir a buscarme, me enoje tanto
contigo, y después el enano ese, y no te imaginas como me sentí al verte de la
mano de Oscar, al final de la pelea yo solo tenía un objetivo en mente:
alejarte de Oscar así tuviera que traerte a rastras para aclarar de una vez por
todas lo que hay entre nosotros, al salir a luchar me tope con Oscar y le advertí
que se alejara de ti, y ¿Qué hizo el idiota? Traerte aquí enseguida, arruinando
mis planes y por ultimo llegar a casa, ir a buscar a Oscar y encontrarte en SU
cama… No puedo Mar, no puedo verte con nadie más que no sea YO
--Max yo…
--¡Shh! –pidió
abrazándome fuertemente y continuo –Nunca, créeme nunca he sido un tipo celoso
y territorial, y ahora que conozco lo que son los celos, me ponen loco, furioso,
simplemente no los soporto, todas las mujeres con las que he estado cuando
mucho las he visto 3 veces y eso era cuando el sexo era aceptable, tampoco he
estado en una relación de exclusividad, pero quiero intentarlo contigo, tú Mar
vales la pena.
--Lamento
haberte causado algún daño Max, créeme yo igual sufrí, pero no creo que tu y yo
juntos podamos lograrlo…
--Intentémoslo
Mar, nos lo debemos
--He pensado
que lo nuestro fue algo que se dio de manera rápida así no funcionan las cosas,
creo que primero debemos conocernos mejor –me libere de su abrazo y él me lo permitió,
camine unos pasos dándole la espalda
--¿A que te
refieres?
--Seamos
amigos –voltee a ver su reacción, pero en medio de la oscuridad no pude descifrarla.
--¿Con
beneficios?
--Claro que
no, serás tan amigo mío como lo es Oscar ó Gio ó Rubén
--Mierda Mar,
te acabo de decir que no tolero verte con otros hombres y menos si solo quieres
ser mi “amiga”
--Solo son
amigos Max
El silencio
reino por unos minutos
--¿Cuánto tiempo
Mar? ¿Cuánto tiempo tendré que simular que no eres mi chica?
--El
necesario –desafié –Es importante para mi Max llegar a conocernos mejor, ver si
esto en realidad funcionara o no, a lo mejor podemos ser buenos amigos
--Por favor –bufo
Max enojado me tomo de la mano y arrastro a la cama, lo seguí sin peros nos
acostamos y en seguida Max me jalo hasta que mi espalda quedo pegada a su
enorme pecho, deslizo su mano por mi cadera y la dejo descansar justo en mi
vientre.
--¿Es tu
petición final? –inquirió Max
--Lo es
--De
acuerdo, te seguiré el juego pero yo también tengo algunas normas que debes
cumplir Mar
--¿Cuáles? –pregunte
curiosa
--Nada de
besos con tus amigos
--Mas allá
de la mejilla nunca los he besado en la boca ni en ningún otro sitio un amigo
es solo eso
--Perfecto
nada de tomarse de la mano, nada de dormir en sus camas, nada de abrazos, nada
de llevar sus ropas, nada de no llevar TU ropa, nada de ropa demasiado
reveladora NO minifaldas, nada de tontear…
--Jajajajajaja
¿es en serio Max?
--No te rías
Mar, lo estoy diciendo totalmente en serio, no me importa con quien estés si
incumples una de estas normas, golpeare a tu amigo en turno
--Jajajaja –
continúe riéndome, hasta que Max me giro inesperadamente y se posiciono encima
de mí.
En un
movimiento veloz, bajo su boca a la mía tomándome desprevenida y besándome con gran
intensidad, metió su lengua sin permiso y se rehusó a dejarme ir hasta que no
correspondiera su gesto, lo hice y mi lengua salió al encuentro de la suya, devore
sus labios hasta quedarnos sin aliento. Max beso mi mejilla y por fin
regresamos a nuestra posición abrazados y nos sumimos en un profundo sueño.
Por la
mañana me despertaron las caricias de Max sobre mi rostro, pasaba el dorso de
su dedo con suavidad sobre mi mejilla, siguiendo el contorno de mi cara y por
ultimo su pulgar acariciaba con delicadeza mi labio inferior, abrí los ojos y
lo contemple un momento, él me observo y sonrió, se veía malditamente guapo
sonriendo y frunciendo ligeramente su nariz. ¡Es solo un amigo! Me repetía a mí
misma, ¡Porque tu lo quisiste idiota! Me contestaba mi libido internamente.
--Buenos días
–dije aun somnolienta
--De los
mejores –respondió Max aún sonriente
--¿A que
horas son?
--Las 10
--¡Oh! Debo
irme, tengo cosas que hacer
--¡Quédate
conmigo Mar!
--No puedo,
en verdad
--¿Qué harás?
No podía decirle
que hoy vería a Rubén, no tan pronto, le diría pero ya que tuviera un pie en la
calle, conociéndolo me encerraría en la habitación y tenía poco mas de 2 años
sin ver a mi amigo, intente levantarme y el solo permitió que me sentara a su
lado
--Tengo que
ir al cuarto de Oscar, deje mi ropa ahí
--Ni de
chiste yo iré por ella
Moví la
cabeza negando y finalmente dije:
--De
acuerdo, trae mi ropa por favor Max
--Ves Mar,
no es difícil seguir las reglas –contesto sonriente y levantándose de la cama
de un brinco, lo observe salir de la habitación admirando su magnífico cuerpo,
como siempre el solo vestía unos pantalones de chándal negros. Al cabo de unos
minutos el trajo mi ropa, salí volando a cambiarme en su baño y cuando Salí Max
ya me esperaba con unos jeans y una camisa negra ajustada de cuello V.
--Primero a
desayunar Mar
--Si –cuando
pase a su lado el me giro tomo mi rostro en sus manos, yo abrí los ojos como
platos y gire mi cabeza justo cuando él iba a besarme
--¿Por qué giraste
la cabeza?
--Eres mi
amigo ¿recuerdas? Además cierto hombre primitivo me dijo que siguiera sus reglas
– conteste sonriente y avanzando hacia la salida del cuarto.
--No es
justo Mar, yo soy la excepción de esa regla
--Todos
parejas, no refunfuñes y vamos a desayunar
Sin
esperarlo baje a la cocina, donde se encontraba Oscar, Gio y Adrián
--Buenos días
–salude a todos
--¿Por qué te
fuiste sin avisarme gatita?
--Yo me la
lleve porque me fastidia verla contigo en la cama –respondió por mi Max
llegando a la cocina y retando a Oscar con la mirada
--Lo siento
Oscar, no me di cuenta, mi amigo no respondió al comentario de Max, se acerco a
mí y me dio un beso en la frente
--Sin
problemas gatita
Sabía lo que
se venía, me interpuse a Max que traía una expresión enloquecida en los ojos,
le sonreí y le pregunte:
--¿Café? El me
miro, respiro 2 veces y respondió
--Por favor
Oscar se sentó
al lado de Gio ignorando que estuvo a punto de ser golpeado por Max.
Tomamos el
desayuno con calma, entre bromas de Oscar y Gio, Adrian lanzaba miradas entre
Max y yo, me sentía molesta con él y decidí ignorarlo completamente, observe mi
bolso en el sillón y corrí a buscar mi celular, tenia 2 llamadas perdidas de
Rubén y un mensaje del mismo:
>>No se te olvide que hoy
llego a México, paso por ti a tu casa a las 3pm J
<<
Sonreí con
cariño al mensaje de mi amigo y sentí la mirada especulativa de Max sobre mí, devolví
el teléfono al bolso y lo coloque en el respaldo del sillón para verlo en
cuanto me fuera, tenía el tiempo medido para poder regresar a casa, bañarme y
arreglarme, pensaba despedirme cuando bajo una Nadia somnolienta entrando a la
cocina, beso a Adrian nada mas al entrar, este le sonrió con cariño y le sirvió
un café por fin Nadia reparo en mi presencia, más allá de la cocina aun me
encontraba parada al lado del sillón a 2 metros de la puerta le levante la mano
saludándola.
--Mierda Mar
no te había visto
--Descuida
lo supuse –sonreí
--No
esperaba verte por aquí, pensé que estarías toda nerviosa arreglándote para
Rubén
--¿QUÉ? –grito
Max, me lleve las manos a la boca y emprendí uno de los actos más tontos, cogí
el bolso y Salí corriendo de la casa, gritando
--¡¡Luego te
lo explico!!
--MAR,
REGRESA AQUÍ, AHORA
--Adiós
amigo.
Se
escucharon una serie de ruidos, pero no fui capaz de detenerme, tenía que ver a
Rubén 2 años era mucho tiempo, en la calle respire más tranquila deje de correr
y camine cuando escuche pasos aproximarse voltee justo a tiempo para ver a Max
corriendo y buscándome, Adrián y Gio lo seguían de cerca era inevitable que me
viera, así que me plante lo mas recta posible, en cuanto me vio dejo de correr,
y camino ferozmente hacia mí, parecía un depredador. Vamos Mar, vamos tu puedes
me gritaba internamente
--Tú,
vuelves conmigo ahora Mar
--Ni de
broma –hizo el intento de tomarme por el brazo y yo retrocedí a tiempo de que
no lo tomara
--MAR –advirtió
con voz contenida, en ese instante llegaron Adrian y Gio
--No es
posible Max, acabamos de hablar, dejamos las cosas en claro y sales con esta versión
de macho neandertal, entiéndelo soy tu amiga tanto así como de Rubén a mi amigo
tengo más de 2 años sin verlo, necesito ir con él
--Dijimos
amigos no Ex novios—grito él
--Es mi
amigo, él lo fue antes de ser novios y lo seguimos siendo cuando ya no lo somos
¡Entiéndelo! ¡Confía en mi Max!
--En ti confió
en él no
--Ese es un dicho
es absurdo y lo sabes
--Mar, por
favor, te explique cómo me siento, esto me sobrepasa
--¡Lo
siento!
--No me
hagas cargarte sobre un hombro y encerrarte Mar
--Si haces
eso Max, en tu vida me vuelvas a hablar, lo juro
El dio un
paso y yo retrocedí
--Mierda Mar
–se paso las manos por el cabello
--Déjame ver
que planes tiene mi amigo, y te llamo para decirte Max, te incluiré si eso es
lo que quieres pero no me pidas que no vaya –eso pareció calmarlo un poco
--Si no me
llamas, te iré a buscar Mar
--No sabes
donde vivo
--Eso no me detendrá
y lo sabes
Le sonreí y
me acerque para besarlo en la mejilla
--Gracias yo
te hablo
--Aún no me
agradezcas nada, puede que mate a ese cabrón –dijo sonriente
--¡Mierda! –dije
sorprendida
--No tienes
idea nena.
lunes, 20 de abril de 2015
Round 3
ROUND 3
Entrada la
tarde hable con Rubén, se encontraba realmente molesto por la forma en la que
Max y Gio no le permitieron hablar conmigo, y más enojado se encontraba por que
yo se los hubiese permitido… si claro como si yo me hubiera podido enfrentar a
ellos. Lo tranquilice y prometí andar con cuidado, Max había insistido llamando
pero como la cobarde que soy apague el celular, sabía que entre los dos había
química yo misma la sentía, una simple mirada de él y me erizaba la piel, pero
él no era la clase de chico de la que una se pudiera enamorar y salir con el
corazón totalmente ileso, lo sabía, tendría que alejarme de él, antes de caer
realmente enamorada, la advertencia de Gio aún rondaba mi cabeza y mi decisión
estaba tomada, no más peleas, no más boxeadores. FIN.
…
…..
…….
……….
Esa semana
fue realmente deprimente, primero por que mi cabeza se encontraba hecha un lío,
sabía que era una cobarde por no luchar, por no darle una oportunidad a Max,
por dejar que eso me separara de mis nuevos amigos, personas realmente
agradables, regañándome a mi misma llamándome cobarde, y prejuiciosa
simplemente iría con la corriente, era arriesgado pero ya había tomado la
decisión. No me llevo más de 2 días decidirme y segundo debido a que yo era una
interna de medicina (en receso, debido a una apendicitis de emergencia la cual me
impidió entrar en mi año de interna, en un hospital al interior del país) tenía
que arreglar todos los trámites administrativos para entrar a mi internado a
principios del siguiente año, ir a la universidad, ir al hospital, ir a la secretaría
de salud me tomo el resto de la semana por lo que no pude regresar al gimnasio
el resto de ella, envíe un mensaje a Max alrededor del miércoles diciendo que
no lo vería esta semana, no hubo respuesta a eso, él había dejado de marcar el
día martes, el día en que había tomado mi decisión, sabía que estaría molesto
pero ya lidiaría con él en cuanto pudiera ir al gimnasio. El fin de semana paso
eterno, y por fin llego el lunes, me aliste para ir al gimnasio, en cuanto
entre.
--Jodidas
gracias por venir a vernos – dijo Gio
--Si… bueno
tuve cosas que hacer.
--¡¡¡Gatita!!!
–canturreo Oscar llegando a mi lado y alzándome en un abrazo
--Jajaja yo
también te extrañe Oscar
--¿Por qué
no habías venido?
--Cosas de
la escuela, trámites que hacer
--¿Toda la
semana gatita?
--Sep
–conteste evitando decir el otro motivo
Después de
otros cinco minutos de plática, sentí un escalofrió erizar los pelos de mi
nuca, había extrañado enormemente su presencia, podía sentirlo alrededor,
voltee a buscarlo y lo encontré… por fin después de una semana volví a perderme
en esos hermosos ojos azules, le sonreí tontamente, pero él solo me observaba
frio y distante, lo entendía, yo tenía la culpa y asumiría las consecuencias
pero primero quería hablar con él, explicarle mis motivos decirle que no era yo
cuando estaba cerca de él, me desarmaba completamente, y eso era un sentimiento
entraño y atemorizante para mí, me quede prendada a él, hasta que él rompió el
contacto y dio media vuelta dirigiéndose mas allá del área de boxeo, era ajena
a la presencia de Gio y Oscar.
--Ha estado
de un humor de perros –soltó Gio observando en la dirección en que Max se fue
--Yo lo
siento…-- comencé a decir cuando Oscar me interrumpió
--Venga
gatita, haz tu rutina, ya perdiste una semana
--De acuerdo
–dije y gire rumbo a la escaladora de la esquina.
Debía
comprenderlo necesitaba tiempo, esperaba poder aclarar las cosas con él,
acabando mi rutina y armándome de todo el valor que poseía decidí arriesgarme y
buscarlo, me dirigí al área de boxeo y me iba a adentrar al pasillo que llevaba
rumbo a los vestidores cuando Adrián se topo conmigo.
--Él no
esta, ya se fue
--¡Oh!
--De todos
modos, ¿para que quieres verlo? Dejaste muy clara tu postura con respecto a él
--Yo solo
ocupo hablar con él, explicarle
--¿Qué?
--Eso no es
de tu incumbencia
--Lo es,
todo en relación a él lo es, Max es mi hermano, y en este momento tú no eres de
ayuda para él… solo aléjate
--No puedo
yo…
--Dije
aléjate –diciendo eso siguió su camino, dejándome totalmente sin palabras.
Por el
momento me iría, pero no descansaría hasta hablar con él, si todo acabo antes
de darle una oportunidad, me pondría mis bragas de niña grande y asumiría mi
culpa, pero no sin antes explicarle, era lo mínimo que le debía a Max. Girando
emprendí la salida del gimnasio despidiéndome de mis amigos. A pesar de saber
que Max se encontraba toda la semana entrenando en el gimnasio, decidí seguir
yendo solo los días de mi rutina, le daría tiempo a que enfriara ese carácter suyo, así que el
miércoles con nueva actitud fui al gimnasio y sucedió exactamente lo mismo que
el lunes, en cuanto Max se percataba de mi llegada (por un Oscar un tanto
indiscreto) emprendía la huída, trataba de buscarlo pero siempre me era negado
el acceso por un Adrián molesto, tiempo…tiempo…me repetía siempre, pasando dos
semanas desde que regrese al gimnasio decidí darme por vencida, evidentemente
Max no quería tener nada que ver conmigo, así que cese todo intento de
acercármele, ya no iba a buscarlo, hacia mi rutina, charlaba con Gio y Oscar y
regresaba a mi casa, a Adrián nunca más lo incomode era evidente que yo no era
una de sus personas favoritas, quien sí lo era, era Nadia ellos seguían
saliendo, y mi amiga estaba muy contenta con él, por lo que nunca le comente
nada acerca de cómo su “novio” frustraba mis intentos de acercarme a Max, así
que si me rendía Nadia y Adrián podrían continuar su relación sin que nada se
entrometiera, sabia por Nadia que esta noche de viernes pelearían Max y Adrián,
sin embargo Oscar seria confrontado hasta la próxima semana, Oscar me invito a
la pelea así como Nadia pero decline su invitación (los viernes de pelea el
gimnasio cerraba temprano) me vi forzada a ir al gimnasio antes de lo habitual,
sabia por Gio que ese día ninguno de los boxeadores se entrenaba en el gimnasio,
por lo que al entrar estaba completamente vacío, así que despreocupadamente me
coloque en la cinta caminadora escuchando mi ipod, sin percatarme que tenia
compañía, hasta que una gentil mano toco mi hombro, al voltear pude ver a un
chico que nunca había visto.
--¡Hola! Soy
Aarón –me sonrió mostrando una dentadura perfecta, era unos centímetros más
alto que yo, pelo castaño medio y unos ojos cafés los que realzaba con unas
pestañas negras, espesas y kilométricas
--Hola soy
Mar –me presente, el ahora conocido como Aarón señalo mi ipod
--¿Escuchando
a súper junior?
--¡Oh!—exclame
sorprendida nadie conocía el género de kpop de mis amigos y aquí estaba un
completo desconocido diciéndome eso
--Lo sé, lo
sé soy genial –dijo Aarón y lo supe lo supe en ese momento era gay.
--Jajajajaja
cierto si eres ELF eres genial –reí encantada con él.
En ese
momento lo sentí después de estas semanas aún seguía presente este maldito
sentido que me decía que Max estaba ahí, y él sabía que podía sentirlo, sentí
sus ojos perforándome pero me mantuve serena y decida a ignóralo.
--¿Quién es
tu bias chica?
--Realmente
amo a Lee Sungmin –dije en tono amoroso
--El es
realmente dulce
--Lo sé, lo
sé es todo un caballero ¿y el tuyo Aarón? –era la pregunta del millón, aquí
corroboraría si era o no gay
--Es Kangin,
todo un hombre –nos quedamos viendo Aarón midiendo mi reacción y por último
estallamos en carcajadas
--Jajajajajajajaja
–mi risa murió, viendo como Max se subía enfrente de mi caminadora, lo mire por
un segundo y él no me quito el ojo de encima, se veía realmente molesto tanto
que los músculos de su mandíbula se marcaban en total claridad, no me percate
que Aarón me había hablado, devolviéndole una mirada molesta a Max, despegue
los ojos de él y centre mi atención en mi nuevo amigo.
--¿Perdón?
No te escuche Aarón
--Descuida,
te decía si podemos compartir un audífono para oír la música, prometo no
estorbarte en tu rutina e incluso iré a la
misma velocidad que tu –me sonrió y no tuve más remedio que sonreírle y
aceptar la petición, ambos pausamos las maquinas y nos encontramos en los
extremos de las mismas, después de comprobar si los audífonos eran lo
suficientemente largos para ambos, Aarón acerco mas su caminadora a la mía,
cada uno se puso un audífono nos sonreímos emocionados y pusimos la música para
continuar, por un momento llegue a olvidar a Max, pero mi 6to sentido me decía
que él seguía donde lo había visto por última vez, y una mirada me confirmaba
ese hecho, siempre observándome, el estomago se me revolvió, y era suficiente,
no quería torturarme más, apague mi maquina y me despedí de Aarón,
sorpresivamente me abrazo y me dio dos besos en la mejilla, le sonreí y me
despedí con la mano emprendiendo el camino hacia la salida, una vez afuera
llevaba cerca de 20 pasos cuando un brazo me impidió seguir avanzando, era Max.
--¿Qué
carajos hacías con ese tipo?
--¡Suéltame!
–su respuesta fue llevarme hacia la pared
--¿Qué.Estabas.Haciendo.Mar?
--Que te
importa Max, deja de jugar
--Mira quién
habla de jugar, la señorita hoy no quiero saber nada de ti, y al otro día si
–dijo molesto y acercando su rostro cada vez más al mío, trague saliva.
--Te busque,
trate de explicarte porque no te respondí Max, no dejes esto solo en mis
hombros
--¿Por qué
no lo hiciste?
--Ya no
importa, de acuerdo Max, solo suéltame, terminemos con esto, sea lo que sea
–Max bajo sus labios a los míos y demando una respuesta su beso fue agresivo e
inesperado, aún así lo correspondí se sentía tan bien, esa electricidad volvía
a fluir dentro de todo mi cuerpo, se alejo demasiado pronto de mi, ambos
respirábamos pesadamente.
--¿Por
qué?—volvió a repetir.
--Por que yo
nunca he sentido algo así Max, eres tan intimidante…
--Nunca te
haría daño Mar
--No, no
físicamente lo sé, estando a tu lado me aturdo, no soy yo misma, es un
sentimiento diferente, no me mal entiendas, no es un sentimiento malo todo lo
contrario, solo ocupo entenderlo, te acercas a mí y no pienso… ocupo espacio…
--Jajajaja
¿Ocupas espacio? –pregunto de manera cruel
--Si ocupo
procesar…
--Tienes
jodidas cantidades de espacio ahora Mar –grito furioso y volvió a entrar al
gimnasio
Lagrimas
desbordaron mis ojos, ocupaba espacio claro, él quería adentrarse en un
relación, cuando ni si quiera sabía nada acerca de mi, no sabe ni mi color
favorito, ni mi comida favorita, mi día favorito, ocupaba espacio personal,
ocupaba que esto fuera en serio, pero dado que todo empezó mal, estaba
destinado a terminar de la misma manera, los polos opuestos se atraen de eso no
cabe duda pero es momentáneo se necesita más que atracción en una relación,
cuando estaba a su lado no era yo misma, primero tenía que aprender a sentirme
cómoda con él, ser yo misma, pero llegaba Max y quería que entregara todo a la
primera, limpiando mis lagrimas me fui a casa. No quería huir de nuevo, no
quería dejar a Oscar y a Gio, así que solo tendría que dejar ir a Max, tendría
que optar por tomar un nuevo horario en el gimnasio y minimizar al mínimo mis
interacciones con Max, bien podía hacerlo, esa noche me hablo Nadia y me rogo
ir con ella a la pelea de Adrián, alegando un dolor de cabeza inexistente la
convencí de ir sola y disfrutar con su novio.
La próxima
semana empecé mi rutina 2 horas antes, como el viernes pasado me encontré con
Aarón, hacer ejercicio con él empezó hacer cada vez más divertido, él opto por
realizar la misma rutina que la mía, alegando que era sencilla y práctica,
descubrí que la madre de Aarón era española por eso el saludaba de ese modo, al
terminar él se iba y yo me quedaba a saludar a mis 2 boxeadores y amigos.
Incluso me topaba con Max y Adrián pero los tres nos ignorábamos
deliberadamente.
--¿Quién es
ese enano Mar? –pregunto Gio señalando la puerta por donde se había ido Aarón
--¿Es tu
nuevo novio? Últimamente estas mucho con él–grito Oscar provocando a nuestras
espaldas ruidos de golpes en los sacos de arena, decidida a ignorarlos
--Que malos
son, el no es un enano se llama Aarón y es mi amigo –defendí a mi amigo gay,
aunque ese detalle no era mío para compartir
--Nos estas
cambiando por él gatita
--Jajaja
nunca podría
--Demuéstralo
gatita
--¿Cómo?
–pregunte rodando mis ojos a mi amigo
--Ven a mi
pelea esta noche gatita
--No puedo
Oscar
--Ves, ya
no, nos quieres –dijo mi amigo haciendo un puchero
--De acuerdo
--Perfecto,
hoy es en otro gimnasio, ve a cambiarte y de aquí nos vamos juntos ok
--Solo iré a
la pelea –advertí a mi amigo
--No es
justo gatita
--Oscar, por
favor –imploré
--Anda ve a
cambiarte Mar, no te preocupes no estarás sola –dijo Gio
--Bien, ya
vuelvo –sonreí
Fui a casa a
ducharme, estaba arreglándome cuando sonó mi teléfono, vi el identificador y vi
que se trataba de Rubén
--Hola
–respondí
--No hagas
planes para mañana en la noche y el domingo –dijo Rubén nada más al contestar
--Jajaja
¿Qué pasa?
--Voy a
México el fin de semana llego mañana a las 2pm
--¿En serio?
--Siip no
sabes que ganas de verte Mar
--Yo
también, no lo puedo creer –dije emocionada
--Mar
--¿Sí?
--¿Cómo
sigues? –Rubén estaba al tanto de todo
--Bien, de
hecho esta noche saldré con Oscar y Gio
--Mar
–sanciono Rubén
--No voy a
dejar de ver a mis amigo por él Rubén, eso no es justo
--Pero…
--No, en eso
no voy a ceder.
--¿Ellos aún
son amigos del idiota?
--Si, pero
saben que Max y yo somos como el agua y el aceite, ellos nos ven aparte, son
muy respetuosos Rubén y realmente los quiero
--Ve con cuidado
ok
--No te
preocupes y te veo mañana Ahhhh que emoción –grite
--Jajaja si,
por fin mañana, descansa, besos
--Cuídate,
buen viaje – colgué y enseguida decidí el atuendo a usar, pantalón negro, unas
botas de tacón (hoy me sentía de ánimos para usarlas) y un simple suéter verde
completaban mi atuendo, busque cartera, bolsa y llaves y regrese a las 8pm al
gimnasio justo a tiempo, los chicos iban saliendo y junto a un Adrián sonriente
iba mi amiga Nadia, al verme chillo y me abrazo, creo que eso disgusto a Adrián
por la mirada que me dio.
--Mar, que
bueno que hayas venido
--Si, bueno
se lo prometí a Oscar de último minuto
--Me alegro,
aunque esta noche, no pelea Adrián solo Max – asentí a mi amiga y en ese
momento salieron riendo Oscar y Max seguidos de Gio
--Gatita
–grito Oscar llegando a mi lado y abrazándome –Viniste
--Lo prometí
¿no?
--Vamos
iremos todos juntos
--Creo que
mejor yo los alcanzo allá solo dime la dirección
--No seas
ridícula, ven – entrelazo nuestras manos y fuimos rumbo al carro, esta vez Max
no traía su moto así que éramos 6 no íbamos a caber, sin dar pie a protestar
Oscar llego dando ordenes
--Gio
conduce, Max, Nadia y Adrián atrás, Gatita tu conmigo –sentí la mirada de Max
en las manos entrelazadas de Oscar y las mías y seguir hasta mi rostro, me
negué a verlo, y escude mi cuerpo con el de Oscar, todos siguieron las
indicaciones de mi amigo, Gio tras el volante y detrás de él se sentó Max,
Nadia en medio y Adrián detrás de Oscar.
--Primero me
subo yo gatita y te llevo en mis piernas.
--Oscar de
verdad no es necesario, me voy aparte en un taxi
--Tonterías
–dijo subiendo al auto y jalándome en su regazo.
--Ahora
gatita no hagas movimientos bruscos, si no te quieres impresionar
--Jajajajajaja
–estallaron en carcajadas Nadia y Gio por lo que solo logre ponerme colorada,
al verme así, Oscar tomo mi cabello sujetándolo por detrás de mis orejas,
dejándome una visión periférica libre por donde podía ver a Max dispararle
dardos a mi amigo, agache mi vista y me quede inmóvil como una estatua, Oscar
al notar mi incomodidad frotaba continuamente mi espalda.
Al llegar al
gimnasio rival Max y Oscar entraron por el área destinada a los boxeadores, y
el resto de nosotros como espectadores, ya instalados en nuestros lugares, Gio
tomo posición debajo del ring en la esquina correspondiente a Oscar y a Max
--¿Y bien?
¿Qué ha pasado en este tiempo mar? –pregunto Nadia aligerando el tenso ambiente
--Nada Nan
(apodo de mi amiga) la verdad es que ya entregue papeles para mi residencia,
espero irme el próximo año a Quintana Roo
--Vaya, se
que lo lograras Mar, ya estarías por allá de no haber sido por tu cirugía
--Lo sé,
realmente no puedo creer que perdí mi plaza en el hospital por el que tanto
luche, en fin todo pasa por algo y si no fue antes es por algo –sonreí a mi
amiga y note a Adrián ladeando la cabeza pensativo.
--Deberíamos
salir Mar, solo las chicas, ir de compras y por unos shots ¿Qué te parece
mañana?
--No puedo,
ya tengo un compromiso
--¿con
Oscar? Los note muy juntos en el auto
--No, no es
eso Nan, Rubén llega mañana por el fin de semana –anuncie emocionada a Nadia
--¿Qué? Me
vas a cambiar por ese aburrido
--Nadia
–sancione a mi amiga, sabía que Rubén y ella no se llevaban bien pero al menos
Rubén nunca se expresa de ella de esa manera.
--De acuerdo
diviértete con él –molesta le pregunto algo a Adrian y decidí que había sido
una mala idea venir a la pelea. Por fortuna la pelea no demoro mucho, Oscar fue
primero, tenía un sequito de fans muy locas, gritando piropos que mi amigo
recibía de muy buena gana, su lucha fue pareja pero a diferencia de la vez
pasada mi amigo no sangro aunque recibió un golpe en el ojo que seguramente
dejaría un hematoma en unas cuantas horas, Oscar venció en el 4to round, bajo
sonriendo arrogante y tirando besos a sus fans, la pelea de Max… sucedió lo
mismo que la primera vez que lo vi pelear, se dirigió al centro del ring,
espero a su oponente, me dirigió una mirada molesta y le propino un golpe en la
mandíbula a su contrincante quien cayó sobre su trasero y el referí decidió que
no podía continuar la lucha. Gio nos dirigió a los vestidores, y sentí un deja
vu, solo que esta vez Oscar se encontraba totalmente vestido y con el ceño
fruncido, cosa rara en él, al verme me tomó de la mano y me saco de la
habitación rumbo a la salida.
--¿Qué pasa?
–por fin pregunte cuando llegamos al coche
--Nada
gatita, mucha gente, poco espacio es sofocante –por fin me dio una sonrisa mi
amigo.
--Felicidades
Oscar –lo abrace
--Gracias
gatita ¿nos vamos?
--Oscar,
quédate con los chicos, ve y festeja tu victoria –sonreí para demostrarle que
estaba bien
--No, yo
vine contigo gatita
--No importa
yo…
--Ya se, por
que no vamos a casa, vemos una película y cenamos pizza –sugirió Oscar
--Oscar, de
verdad que no es necesario…
--Vamos
gatita –me jalo del brazo y arrastro rumbo a un taxi que iba pasando, dentro de
este mando un mensaje por su celular, no supe a quien y no pregunte mi amigo
siempre alegre se encontraba en una actitud taciturna que me desconcertaba, al
llegar a su casa, inmediatamente me vinieron a la mente recuerdos que descarte
enseguida ahí aparcada se encontraba alta e imponente la moto de Max. Oscar me
guio dentro de la casa, enseguida pidió una pizza y nos acomodamos a ver la
televisión en un silencio que si bien no era incomodo no era normal en mi
amigo.
--¿Puedo
ayudarte Oscar?
--¿Qué?
--Estás
inusualmente tranquilo
--Solo estoy
cansado gatita
--Descansa
yo…
--Quiero que
este aquí conmigo, tu presencia me tranquiliza
--Yo…
--Mar
¿sabías que una de mis hermanas murió?
--No sabía
Oscar, lo siento mucho
--Su nombre
era Marina –me sorprendí y el enseguida me sonrió.
--Si lo sé,
su diminutivo es tu nombre, ella tiene una hermana gemela, mi hermana Mariana,
mis padres no eran muy originales, ellas eran 2 años menor que yo cuando tenían
16 yo tenía 18 años, y Marina empezó a salir con un tipo que era un adicto, el
poco a poco envolvió a mi hermana y la hizo una adicta, nadie noto algo anormal
al principio, el se aprovecho de ella, lo prostituyo con tal de tener dinero
para sus drogas y ella acepto porque ya era adicta, un día se fue de la casa no
sin antes robar cosas de valor, mis padres la buscaron pero nadie sabía su
paradero pasados 3 meses volvió en busca de ayuda quería rehabilitarse mis
padres la ayudaron y la metieron en una clínica de desintoxicación, ella quería
cambiar—la voz de amigo empezó a quebrarse—acababa de salir de rehabilitación,
volvía a ser ella misma cuando ese tipo volvió a reaparecer, mi hermana nunca
vacilo y lo corrió le dijo que no se le acercara más, un día veníamos los 3 Marina,
Mariana y yo del supermercado cuando un carro freno frente a nosotros y de él
salieron 3 tipos incluido el ex novio de mi hermana y empezaron a jalarla
llevándola con ellos, me metí y luche lo más duro que pude, en ese entonces
solo era un tipo desgarbado, era muy delgado, y entre los 3 me estaban dando
una paliza, le grite a mis hermanas para que corrieran, pero Marina al verme
sangrando rogo por mi vida, y se fue con ellos voluntariamente –Oscar empezó a
sollozar me acerque y lo abrace.
--Shh!! Oscar
no fue tu culpa, ellos eran 3 y tu solo 1—consolee a mi amigo
--Tres días
después encontraron el cuerpo de mi hermana, fue violada y asesinada
brutalmente, ella había cambiado no merecía ese final, Mariana entro en shock y
no hablo durante 1 año, mis padres estaban desechos y peleaban mucho, y yo jure
que nunca más fallaría al pelear por eso decidí ser boxeador. Conocí a Max,
Adrian y Gio y ellos me ayudaron a ser quien soy ahora, mi familia decidió
mudarse a Estados Unidos con familiares de mi padre, no quise ir por que jure
en ese momento encontrar a los tipos que me quitaron a Marina y matarlos, años
después comprendí que la violencia no resuelve nada, y me apasione por esta
carrera, y llegaste tu…--me tense al momento no sabía que tenía que ver en la tragedia
de la hermana de Oscar—Obviamente eres más chica que Marina por un año, ese día
en el gimnasio en cuanto don Ramiro grito tu nombre me intrigaste y al verte de
cerca lo supe… tienes los mismos ojos que mi hermana y la misma sonrisa, sus
carácter son totalmente diferente Marina era extrovertida tu eres introvertida,
pero verte es como ver un pedacito de mi hermana Mar, realmente es…
Oscar
deshizo el abrazo y me miro a los ojos.
--Ahora
estoy muy confundido, pero prométeme algo
--¿Qué?
--Que tu no me
vas a abandonar, pase lo que pase –lo mire desconcertada viendo el sufrimiento
en sus ojos y sin dudar respondí.
--Nunca
Oscar, nunca –lo abrace y permanecimos así hasta que el timbre sonó
regresándonos a la realidad, era la pizza, cenamos en silencio, Oscar observaba
todas mis reacciones
--No quiero
que cambies conmigo gatita, te lo conté por que eres alguien importante para
mí.
--No lo hare
descuida –sonreí, y por fin la atmosfera cambio y solo éramos de nuevo el Oscar
desenfadado y yo. Bostece y contagie a Oscar
--Sera mejor
que subamos a descansar gatita –abrí ampliamente los ojos y el solo rio.
--Si, esta
noche dormirás en mi cama, a menos que quieras dormir con Gio, Max o Adrian
--¿Qué tal
si solo me voy?
--Estas
loca, a estas horas no es seguro para ti, no me voy a pasar de listo contigo
gatita
--Lo sé es
solo que no quiero meterte en problemas con tus amigos
--Eso no
pasara
Nos
dirigimos a la habitación de Oscar, en el mismo piso se encontraban las 4
habitaciones Max al fondo a la derecha y la de Oscar era la del extremo
completamente opuesta, suspire de alivio, al entrar a la habitación de Oscar
observe casi lo mismo que en la habitación de Max, una cama kingsize, un saco
de boxeo, un baño solo que Oscar era más desordenado que Max, Oscar entro al
baño y se coloco un pantalón de franela azul y una camiseta blanca, al menos
llevaba mas prendas que Max, mi amigo me ofreció ropa pero de igual manera la
decline, el insistió tanto que opte por ponerme una camiseta y unos pantalones,
debo decir que si los pantalones eran totalmente sueltos en el cuerpo de mi
amigo a mi me quedaban ajustados en las caderas y los muslos no apretaban pero
eran como una segunda piel adherida a mí, resople y me lave los dientes con
pasta y mi dedo a diferencia de Max, Oscar no contaba con cepillos dentales
extras, al regresar a la cama, me tumbe junto a mi amigo, agradecía su
confianza en mí, y no me atemorizaba dormir con él, Oscar nunca intento
establecer algún tipo de contacto, por lo que cada quien se encontraba de su
lado correspondiente en la cama, después de unos minutos más de platica, el
sueño nos inundo a ambos y caímos rendidos.
Sentí unas
manos levantarme de donde me encontraba y me removí inquieta hasta que fui
acunada por un fuerte pecho, lo que me tranquilizo y seguí en un profundo sueño,
no sé cuanto dormí, pero me encontraba muy agusto tenía una propia fuente de
calor que me envolvía, poco a poco abrí mis ojos cegada aun por la oscuridad, y
me fui dando cuenta que ya no me encontraba en la habitación de Oscar, me
tense, el debió sentirlo, por que me halo más fuerte en sus brazos, mi cara
quedo completamente pegada a su torso desnudo y sus manos frotaban mi espalda,
me quede rígida tratando de adivinar que sucedía hasta que su voz rompió totalmente
el silencio.
--No vuelvas
a dormir en la cama de un hombre, que no sea la mía Mar.
--Max –susurre…
*********************
Holass!!!!!!!!
Espero que esten muy bien, me demore en este capi por algunos compromisos laborales
A tod@s los que se toman de su tiempo para leer mis historias muchas gracias!!!!!!
Aun les debo la conclusion de la otra historia la vdd es que ando blokeada con ella, muchos personajes saldran otros daran un giro pero aun nada en concreto, en cuanto tenga un adelanto o el capi lo subire, el ultimo capitulo d esa historia tiene mas de 6,000 visitas :O x lo que merece continue bien y no por hacerla rapido pierda el ritmo que lleva, bueno eso es todo por el momento, muchas bendiciones a todos cuidenseme mucho y por supuesto que aun me acuerdo de ti kami :) gracias por seguir dandote un tiempo y leyendo estas historias.
]*Mosha*[
domingo, 15 de marzo de 2015
ROUND 2
ROUND 2.
Por fortuna
Max, no iba en el automóvil con nosotros, me refiero a Oscar, Nadia, Adrián,
Gio y yo, de hecho no sabía si él iba a presentarse en el bar que eligió Oscar,
una pequeña, mejor dicho una gran parte de mi rogaba por que no apareciera, y
que en verdad pudiera disfrutar esta salida. Pero la suerte no estuvo de mi
lado, al entrar al bar y subir al
segundo nivel pude distinguir a Max en una gran mesa con cerca de media docena
de personas, algunas de ellas, en su mayoría chicos los había visto en el
gimnasio, Oscar al ver mi indecisión me paso un brazo por los hombros y me empujo
en la dirección donde se encontraban sus amigos. Inmediatamente al llegar a la
mesa, una rubia apareció en nuestro camino, despachándome inmediatamente y
abrazando a Oscar.
--Mi amor,
felicidades, por un momento creí que perderías la pelea –abrazo a mi amigo,
bueno literalmente se le embarro a Oscar.
--No fuiste
la única Charlotte –dijo mi amigo observándome fijamente, a lo que me ruborice
completamente por que en verdad llegue a pensar que mi amigo no ganaría su
lucha. Sin querer inmiscuirme en los asunto de ellos dos tome lugar en el
primer asiento vacío y más lejano de Max, al parecer este acto no paso
desapercibido por él ya que dejo escapar una risa.
Nadia venia
en mi dirección y pisándole los talones se encontraba Adrián, durante el
trayecto converse con él, era un tipo realmente agradable y por el momento
estaba más que interesado en conocer a mi amiga, ella por su parte estaba
actuando como si no le importara tener la atención de esta clase de hombre pero
yo la conocía mejor y podría jurar que mi amiga estaba igual o más interesada
aún en Adrián, sonreí por lo bajo y me anticipe a la llegada de la nueva
pareja.
--Hey, Mar
prácticamente corriste del auto –dijo Nadia sentándose en el banco a mi derecha
--Solo
deberías agradecerme –dije en voz baja solo para que Nadia me escuchara, ella
tubo la decencia de parecer avergonzada, por lo que deje escapar una sonora
carcajada, todos en la mesa me observaban entre divertidos y curiosos.
--Gracias
--De nada
Nadia ya sabes para eso estamos las amigas.
Adrian
vacilo entre sentarse al lado de mi amiga e ir al encuentro con Max en la parte
opuesta de la mesa, optando por la segunda opción y dejando a mi amiga un poco
decepcionada.
--No te
preocupes, seguro al rato te viene a invitar a bailar –consolé a mi amiga.
Por fin
todos se encontraban sentados y tomando de sus bebidas, las risas no te dejaban
escuchar las conversaciones de todo, pero el ambiente era realmente agradable,
incluso el malhumorado de Gio reía a carcajada limpia, observándolo bien el
tipo era bastante impresionante, más bajo que los demás pero aun así llegaba al
1:80 ojos negros y pelo corto estilo militar, como éramos un grupo de alrededor
de 10 hombres y solo 3 mujeres, las groupies invadieron la mesa con rapidez,
observe como 2 morenas guapísimas se acercaban a Max y Adrian al fondo de la
mesa, Adrian tuvo la delicadeza de tomar su cerveza y emprender la huida,
agradablemente llego a nuestro lado invitando a mi amiga a bailar, pude ver su
indecisión al dejarme sola en la mesa, la anime con un movimiento de mano y le
hice los 2 pulgares arriba, ella se levanto de un salto y se fue con Adrián a
bailar, sostuve mi sonrisa un par de minutos y solo voltee cuando alguien
carraspeo a mi derecha era Gio.
--¿Y bien?
¿No se supone que eres la novia de Oscar? No deberías dejar que Charlotte lo
acapare de esa manera…
--Espera,
espera –dije levantando una mano indicando que parara—Oscar y yo solo somos
amigos –aclare
--¿Sí? El
nunca había invitado a una chica a verlo pelear –argumento Gio enarcando una ceja
--Mmm
realmente no sé porque pero en verdad solo somos amigos, ni él quiere conmigo
ni yo con él, de hecho presiento que él me ve como una mascota.
--Jajajajajaja
–rio Gio haciéndome sonreír
--¿Qué es
tan gracioso? –pregunto Max con voz malhumorada llegando a nuestro lado de la
mano con una de las morenas anteriores. Apuesto a que una chica como ella si
era su tipo ¿Cierto? ….
--¿Estas
bien Gatita? –grito Oscar
--Perfecta
–respondí a Oscar --¿Lo ves? –le dije a Gio e ignorando la pregunta de Max, Gio
solo rio y movió la cabeza.
--¡Gio!
–advirtió Max con voz contenida, no sé que fue lo que Max le dijo a Gio con la
mirada, que este ultimo solo me observo a mi después a Max y por ultimo solo
movió la cabeza levantándose de mi lado.
Max decidió
tomar ese asiento, y la morena en el regazo de él, trate de actuar como si no
me importara, pero solo tenía ganas de estrangularlo, me estaba restregando en
las narices cual era su tipo ideal de mujer?? Por más que trate de no voltear a
verlos, mi curiosidad gano, discretamente voltee, y la mujer parecía una
sanguijuela pegada a su cuello, observe la escena entrecerrando los ojos, seguí
el recorrido de la mano de ella alrededor del cuello de Max, subiendo por su
mejilla izquierda pasando al pómulo y por ultimo… Mierda!!! Sus ojos estaban
puestos en mi obviamente vio que yo observa la escena entre ellos, trabe mi
mirada con la de él hasta que la morena se hecho hacia atrás bloqueando gracias
a dios mi vista de Max, decidí que no podía seguir al lado de Max, me levante
de mi asiento y sintiéndome acalorada por haber sido atrapada mirando a
hurtadillas decidí bajar a la barra por otra cerveza, la pista de baile se
encontraba en la planta baja, así que observe como mi amiga y Adrian seguían
bailando y riendo, ¡wuju! Al menos ella se la estaba pasando de maravilla,
había un lugar en la barra, me senté y pedí mi cerveza, llevaba cerca de la
mitad, cuando alguien me hablo
--¿Mar?
¿Eres tú?
--¿Daniel?
--Si
–respondió-- chille y salte a abrazarlo, era el primo de Rubén, con él siempre
me lleve muy bien
--¿Qué haces
por aquí?
--Pasando el
rato con unos conocidos y ¿tú?
--Ahh…
pasando el rato con unos conocidos también jajajaja
--Jajaja
tonto –lo golpee en el brazo
--Ven vamos
a mi mesa a platicar
--Vale—dije
y sin pensármelo 2 veces deje que me guiara, no sé cuánto tiempo estuvimos
hablando, pero me la pase riendo, Daniel era una persona sumamente graciosa,
tome cerca de 6 cervezas más estando con él y empezaba a sentir esa niebla que
se avecina sobre uno cuando ha tomado de más, sentí un escalofrió recorrer mi
espalda y a Daniel abrir los ojos.
--Oh, déjame
adiviiinar Dannny atrás de miiii hay un monummmental pedazooo de carne masssculina
–reí como histérica al ver tragar saliva a mi amigo.
--Hay 3!!!!
–grito mi amigo y haciendo un 3 con los dedos.
--¡Mierdaaaaa!
–voltee a ver a un Gio divertido, un Max sumamente cabreado y disparándole una
mirada de esas que tan bien le salen a mi amigo, y a un Oscar molesto
--¿Dónde
estabas Mar? Desapareciste y nos tenias muy preocupados –dijo Oscar
--¡Bah!
Todosss estaban muy entre…tenidos y yooo me encontré a miii amigo, y… aquí
estoy
--¡Vámonos!
–dijo Max tomándome del brazo y poniéndome en pie.
--¡Sin tocar
amigo! Sin tocarrrrrr –dije zafándome de su agarre y provocando la risa de Gio
–Dany te llamooo… para seguir platicando
vale
--Cuídate
Mar –dijo Daniel abrazándome, unas manos me separaron rápidamente de Dany, creí
tontamente que sería Max pero para mi sorpresa era Oscar
--¡Vámonos!
–dijo mi amigo enojado
Iba
escoltada por estos tres hombres y me sentí tan pequeña, ¿Por qué se enojaban?
No había hecho nada malo, creí que regresaríamos a la mesa, pero salimos del
bar, no veía a Nadia por ningún lado
--¿Y Nadia?
–pregunte a Gio
--Se fue con
Adrián
--¡Oh!
--La llevo
–dijo Max, no tenía idea de que hablaban
--No creo
que sea buena idea, ha tomado mucho y en la moto el aire…
--¡Estánnn
hablando de miii! No si preocupen puedo tomar un taxiii
--¿A las 3
de la mañana, gatita?
--Ya… puedo
intentarlo
--¡¡Ya
basta!! Me la llevo, los veo en la casa –Max entrelazo mis dedos con los suyos
y me arrastro detrás del bar.
--¡Suéltame!
Puedo caminar sola – me soltó e inmediatamente me empujo contra la pared del
callejón y aprisionándome con sus dos brazos a cada lado de mi cara
--No vuelvas
a huir de mi Mar –amenazo
--¿Qué? No
estaba…
--Lo hiciste
después de verme con esa chica
--No, yo
solo baje por una cerveza y me encontré con mi amigo, eso es…
No tuve
tiempo a reaccionar, Max estampo sus labios en los míos, jadee por la sorpresa,
y el aprovecho esto para introducir su lengua en mi boca, al principio no
respondí el beso, pero cuando Max me abrazo pegándome a su cuerpo alce los
brazos y lo abrace por el cuello, el bajo sus manos a mi cintura atrayéndome
más cerca si eso era posible, mi lengua salió al encuentro de la suya, el gruño
con satisfacción y continuo besándome, mandado escalofríos a todo mi cuerpo,
después de un tiempo el paro el beso, pego su frente a la mía y me vio con esos
hermosos ojos azules.
--¿Vas a
seguir negando nuestra química, Mar?
--…..–no
podía hablar
--Vamos,
pequeña, es inútil decir que no sientes esto, trate de permanecer lejos… eres
tan inocente—dijo deslizando una mano por mi mejilla
--Max…Túuuu
me dijiste que no soy tu tipo, que te hizo cambiar de parecer ehhh
--Ya
discutiremos esto, cuando estés 100% sobria—me dio una mirada molesta
--No…
essstoy borracha
--Tampoco
sobria
--¡Touché!
–dije ganándome una sonrisa de Max, la más sincera que le vi desde que lo
conocí, no recordaba que el tipo tenía un par de hoyuelos en las mejillas que
te robaban el aliento.
--¿Koala o
mono? –pregunto Max
--Ehhh…
Koala
--Rogaba a
dios por esa respuesta
--¿De quee
hablass?
--Ven –me
giro rumbo a una motocicleta negra cromada
--¡Woooww! Nunnca
he montado una
--¿Será tu
primera vez? –dijo con una sonrisa maliciosa, el doble sentido de sus palabras
me hizo sonrojar de la cabeza a los pies, porque en los dos aspectos era mi
primera vez, y cuando digo que me sonrojo quiero decir que me vuelvo
completamente del color de un tomate. El debió notarlo porque trago saliva
ruidosamente.
--No me
jodas… Mar –tomo mi rostro entre sus manos-- ¿Nena aún eres virgen?
--Eso no
esss de tu incumbencia –el sonrió recordando nuestra confrontación después de
la pelea
--Nena,
maldita sea si no lo es, tienes 23 años y ¿aún eres virgen?
--¿Comooo
sabesss mi edad?
--Se más de
lo que crees, ahora responde lo que te pregunte –no podía vocalizarlo sin
sentir más vergüenza así que solo asentí, el planto un beso en mi frente
--Nunca he
sido un tipo territorial, pero demonios, no sabes lo feliz que estoy de saber
que yo seré el primero contigo nena
--¿Y quien
dice que serás tú?
--Yo lo seré
nena –prometió sin vacilar –Venga vámonos antes de que se haga más tarde.
Me tomo de
la mano y caminamos hacia la moto al llegar me explico la posición del mono,
solo era ir sentada atrás de él abrazándolo y el koala era lo mismo pero
abrazándolo enfrente, esta posición era estorbosa para él como conductor, trate
de irme como mono, pero él se negó.
--Elegiste
koala Mar, venga súbete –el ya se encontraba montado en la moto
--Pero voy a
esstorbarrrtte
--Nena, no
me hagas subirte a la fuerza, ven –me tendió una mano y en cuanto le di la mía
me jalo cerca de él, me instruyo a subir enfrente de él cara a cara, tomo mis
piernas y las subió sobre las de él –Abrázame con tus piernas nena –hice lo que
me pidió y me jalo más cerca de su cuerpo –Esconde la cabeza en mi pecho y
abrázame, arranco la moto sin problemas, me pegue más a su cuerpo impulsada por
la velocidad y el gruño con satisfacción, después de alrededor de 10 mins
detuvo la motocicleta en una casa de 2 niveles de color verde.
--Llegamos
nena, ven –me ayudo a bajar de la motocicleta y antes de emprender el camino a
la casa de nueva cuenta tomo mi rostro entre sus manos y me planto un simple
beso en los labios, me encontraba tan confundida, que el debió notarlo --¿Qué
pasa Mar?
--No lo sse,
tu dimmelo, estoy tan confunndida
--Te dije
que lo hablaremos… en otro momento en el que te encuentres mejor, anda
–empezamos a caminar rumbo a la casa tomados de la mano, cuando de repente la
puerta se abrió precipitadamente
--¿Dónde
demonios estaban?¿Por que tardaste tanto en traerla Max? –rugió Oscar
--Cálmate,
ELLA estaba CONMIGO –enfatizo Max enfrentando a Oscar
--¿Por qué
pellean? Calmmenseen
--¿Estas
bien gatita?
--Siiipp
--Ven –me
arrebato del agarre de Max y entramos a la casa –Te preparare un café y después
a dormir gatita, siéntate aquí un momento –mi amigo me condujo a un sillón de
dos plazas, en vez de sentarme me acosté sintiéndome mareada al momento
--¿Mar?
¿Estas bien? –esa era mi amiga Nadia, no sabía como ella había llegado a este
lugar, solo que al parecer ella ya tenía rato, llevaba una camiseta de hombre
que le llegaba hasta la rodilla
--Siiipp y
ttu mejor que yoo por lo quuue veo –mi amiga se sonrojo y detrás de ella
apareció Adrián, vaya ellos no perdían el tiempo
--¿Quién
permitió que bebiera tanto? –pregunto Nadia a nadie en particular, en la sala
ya se encontraban todos reunidos
--Tú eras su
acompañante en todo caso es tu responsabilidad –dijo Gio malhumorado
--¡Gio!—advirtió
Adrián molesto
--Esstoy
bien –articule desde el sillón, en ese instante llego Oscar con una taza de
café y se sentó a mi lado, ayudándome a sentar, y apoyándome contra el, capte a
Adrián sosteniendo a Max por un extremo
--Tomalo
gatita –insto Oscar
--Gracias
Oscar –tome la taza y sonreí a mi amigo –Perdón por arruinarrles la noche,
perooo estoy bien, de acuerrrdo, estanndo con Dany, no me mediii, lo siennnto
--¿Dany?
¿Daniel? Como el primo casi hermano de tu ex novio Mar –dijo incrédula Nadia
--El mismo
–confirme y de pronto todo mundo quedo en silencio
--Ven,
vayamos a dormir gatita –tomándome de la mano y levantándome
--Olvídalo
Oscar, ella se queda conmigo –rugió Max llegando a nosotros en cuestión de
segundos
--No, ella
es mi invitada, ella duerme conmigo Max
--Yo me
quedare con ella si quieren –ofreció Gio sonriendo
--¡Vete a la
mierda Gio! –dijo Max
--Yooo,
puedo dormir en el sillón –ofrecí
--Ella no es
Marina Oscar, ella no es tu responsabilidad –dijo Max arrebatándome del agarre
de Oscar
--Ya sé que
no es mi hermana estúpido, pero como si lo fuera, si llegas a lastimarla, te
juro que te lo hare pagar con creces –respondió Oscar enfrentando a Max cara a
cara
--Yo y Mar
nos quedamos juntas –contraataco Nadia
--Nadia,
nena ¡no hemos terminado! –ese fue un Adrián sonriente
--No se diga
más Mar se quedara conmigo –dijo Max –Prometo no pasarme de listo Oscar
--Advertido
estas –dijo Oscar plantando un beso en mi mejilla –Buenas noches gatita, si
ocupas que llegue a ti, solo grita ¿Ok?
--Siipp
descanda Oscar, perdonn por todas lasss molesttias
--Descansa
gatita
Oscar salió
de la sala rumbo a las escaleras sin despedirse de nadie más, fue algo extraño pero
no dije ni una sola palabra. En ese momento sonó mi celular, pero yo no lo
traía, ya que mi bolsa la había dejado en la mesa de Óscar y Max, voltee
buscándola y vi a un Gio sosteniéndola triunfante
--Graciasss
–tendí mi mano pero él me ignoro sacando mi celular de la bolsa, al
parecer no le habían dicho que es una
falta de educación buscar en la bolsa de una mujer.
--Diga
–respondió Gio
--¡Oh
demonios! Damellooo –me abalance sobre él pero Max me sostuvo por la cintura
--Ella se
encuentra bien –Gio perdió la diversión del rostro y me tendió el teléfono
--Bueno
–conteste dudativa
--Mar… ¡Oh
gracias a dios! Por fin me respondes –era Rubén
--Callllma,
estoy bieenn
--¿Estas
borracha?
--Nooo…
bueno… poquito
--¿Con quien
estas?
--Con
Nadiaa, Gioo, Adrian, Max y …bueno Oscar ya se fue a dorrmiirr
--¿quieres
que Dany vaya por ti? Me hablo muy preocupado, dice que 3 tipos te sacaron del
bar
--Estoy bien
Rubén –en cuanto dije su nombre, Max me quito el celular de la mano
--Ella esta
bien y si nos disculpas ELLA Y YO nos iremos a la cama –sin más explicación
colgó
--Jajajajajajaja
–Nadia estallo en carcajadas –Como quisiera ver la cara de Rubén en estos
momentos –no dije nada pero me enfurruñe, ¿Quién se creía él para colgarle a mi
amigo?
Max me tomo
de la mano y me llevo rumbo a las escaleras, al llegar al segundo nivel nos
desviamos a la derecha y hasta la puerta del fondo, sin decir nada abrió la
puerta y me indico que entrara primero, no esperaba ver una habitación así, la
dominaba una cama tamaño King size en medio, un equipo de sonido al fondo y
junto a la ventana que se deslizaba para dar paso a un pequeño balcón se
encontraba un saco de boxeo.
--El baño se
encuentra por aquí –dijo Max señalando la puerta del lado derecho
--Gracias
–Max llego enfrente de mi nuevamente tomo mi rostro entre sus mano y podría
jurar que ronronee, por 3era vez esta noche bajo sus labios a los míos, esta
vez el beso fue dulce y largo. Nos quedamos mirando fijamente yo en sus ojos
azules y él en los míos cafés, hasta que la madre naturaleza hizo un llamado
urgente
--Necesito
usar el baño y un cepillo dental –Max me miro y trato de salir de alguna clase
de aturdimiento
--En el
baño, el espejo se abre en la 2da repisa hay cepillos dentales nuevos
--Gra…cias
Una vez
dentro del baño y habiendo realizado mis necesidades fisiológicas, me eche agua
en la cara, y me anime a salir. Al salir me encontré a un Max recostado en la
cama con un pantalón de chándal negro y… nada más, trate de no comérmelo con la
vista, pero al parecer no fui lo suficientemente rápida ya que lo escuche reír
por lo bajo.
--Ven Mar
–dijo sentándose en la cama y palmeando su lado.
--Creo que
prefierro el otro lado –dije y pase a su lado para irme al contrario de él,
cuando un brazo me agarro por la cintura y me tiro sobre la cama en un segundo
me encontré debajo de él y él tomando posesión nuevamente de mi boca, era
demasiado para mi, Max me aturdía en una forma no sana, simplemente no pensaba
cuando hacia eso, metió la mano por debajo de mi blusa y tuve un shock, el no
estaría acostumbrado a sentir… tal volumen apuesto a que sus otras conquistas
eran al menos la mitad que yo me congele y eso fue todo para que reaccionara,
empujándolo a un lado.
--No puedo,
yooo no… lo…siento
--Mar, nena
no iba a pasar a más, solo quería sentirte, tengo semanas deseándolo y no pude
resistirme
--Yo, no
creo que tu y yo…
--Shh!! Eso
lo hablaremos después ¿de acuerdo? –asentí –Ahora solo hay que dormir
--Bien
–acorde
--¿Quieres
que te preste unos bóxers y una sudadera? O ¿Prefieres dormir desnuda? Opto por
la segunda opción –dijo con un brillo perverso en los ojos
--Prefiero
dormir como estoy –aclare
--Mar, nena
en verdad prometo no hacer nada que te incomode, no puedes dormir como estas,
vamos se razonable
--Solo me
quitare la chamarra y los tenis, puedo dormir con lo demás –eso exaspero a Max
que solo resoplo y dijo un “Como quieras”
Me subí al
lado opuesto de la cama, siempre sintiendo los ojos de Max sobre mí, al
acostarme
--¿Me
podrías regresar mi teléfono?
--No
--¿Perdón?
--¿Vas a
hablarle a tu ex novio?
--Solo le
mandare un mensaje, debe de estar preocupado –gire para enfrentarlo y dije –No
debiste decirle eso
--Es la
verdad, ahora Tú y Yo estamos en la cama
--Ashh
contigo no se puede Max, mi teléfono por favor –demande
--Te lo daré
en la mañana vamos a dormir ahora Mar – se estiro y apago las luces,
rápidamente me metí entre las cobijas y me aparte lo mas lejos de Max que pude,
a los pocos minutos sentí movimiento en la cama y a Max llegando a mí, me tomo
de la mano y me jalo cerca de él
--Venga Mar,
solo quiero abrazarte durante la noche de acuerdo
--No me
gusta que me abracen
--Eso es por
que no era yo – se volteo quedando detrás de mí su pecho pegaba con mi espalda
y paso una mano por mi cadera dejándola descansar ahí, me sentí expuesta pero
pasaron un par de minutos y me sentí totalmente cómoda, me relaje y caí en un
profundo y reparador sueño.
Cuando desperté
me encontraba sola en la cama, me levante para asearme en el baño, al salir
recupere mi celular de donde lo había dejado Max, todos los recuerdos jugaban
en mi mente sabía a ciencia cierta que no había soñado nada de eso, pero aún
así era difícil de asimilarlo todo. Salí
de la habitación dispuesta a huir sin encontrarme con nadie, sentía vergüenza de
la pasada noche y no tenía ganas de enfrentar a Max… no aún… no estando con una
resaca.
Iba por el
pasillo rumbo a las escaleras cuando una puerta se abrió, me congele en el
sitio
--¿Cómo estas
“gatita”? –dijo Gio sonriendo como un gato, achine los ojos de manera
amenazante y el solo rio, supongo que no lo intimide de cualquier modo.
--No te
exaltes chica, me caes bien y por eso quiero decirte esto: “Aléjate de los
problemas, aléjate de nosotros eres demasiado buena para estar metida entre
esta mierda, vas a salir lastimada”.
--¡Woow! Realmente
no me esperaba eso…mmm…supongo que Gracias Gio…
--No lo
tomes a la ligera, es completamente en serio lo que te dije
--Bueno, me
iré a casa a meditar eso –dije deseando no perder más el tiempo antes de que
regresara Max, por algún motivo me sentía recia a verlo, quería analizar toda
la noche pasada antes de enfrentarlo
--¿No
esperaras a Max?
--¿No me
dijiste que me alejara de ustedes?
--Si, pero…
--¿Pero que?
Dicen que las mujeres son las complicadas pero los hombres solo dan mensajes
contradictorios, Ashh
--Jajajajaja
si, lo sostengo me caes bien chica, pero Max se cabreara contigo lo sabes ¿no?
El fue a entrenar, diario lo hace cuando tiene peleas próximas, y él espera
encontrarte aun en su … --se callo abruptamente
--¿Dónde?
--En su cama
–dijo con una sonrisa
--¿En que época
se creen que estamos?
--Por lo que
ayer vi, eres “SU CHICA” por supuesto que los hombres esperamos ver a nuestra
chica esperando por nosotros, tu amiga lo hace, ella aun sigue en la habitación
de Adrián
Abrí la boca
sorprendida pero la volví a cerrar, hasta aclarar mis ideas.
--Uno no soy
ninguna propiedad, de NADIE –enfatice –No uses esos adjetivos conmigo, Dos
Nadia es una adulta ella sabe que le conviene y que no, la apoyo si ella quiere
esperar por Adrián, bien por ella y tres ¿Dónde esta Óscar?
--¡Que carácter
mujer! –Gio quiso sonar molesto pero yo podía ver una sonrisa en sus ojos –Max,
Adrian y Oscar fueron a entrenar
--¿Tú no
eres boxeador también? –pregunte curiosa después de todo Gio tenía el cuerpo de
uno
--Lo era –dijo
y por primera vez lo vi serio y perdido en sus pensamientos, había alguna
historia tras esas palabras.
--Gracias
Gio –sonreí e impulsivamente lo abrace tomándolo por sorpresa
--De… nada,
eres bastante extraña
--Jajaja
bueno me voy ahora.
Baje las
escaleras rápidamente y salí de la casa, no tenía idea de donde me encontraba, así
que decidí caminar hacia el lado derecho, llevaba alrededor de 10 mins
caminando cuando sonó mi celular, lo saque del bolso para ver el nombre de MAX
sonando, el debió haberlo metido en la memoria de mi celular, dado que yo no lo
tenía registrado. Decidí no responder la llamada, el insistió 10 veces más
estaba tentada a apagarlo pero planee una escusa y al pagarlo no funcionaria,
la próxima vez que viera a Max simplemente diría: No escuche el celular porque
iba en el transporte público, Upss lo siento Max. Por fin un taxi apareció en
mi línea de visión lo aborde y me dirigí a mi casa, al llegar revise nuevamente
el celular y tenía un mensaje.
>>Te
gusta desafiarme verdad nena, ni por un momento creas que esto ha terminado, es
el principio, me canse de huir de ti y no descansare hasta que tu también lo
aceptes, después de lo de anoche, tus besos, estas loca si crees que te dejare
en paz, nos vemos pronto Mar <<
--¡¡¡¡Mierda!!!!
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